¡Hola! Hoy os traigo el relato con el que participo en el reto Inktaire de octubre que administramos Inkties y yo.
Espero que os guste:
Entrada informativa AQUÍ.
***
Querido
diario:
Hoy
ha sido el día de mi boda. Cuando sonó la melodía con la que entré en aquel
templo sagrado todos se levantaron para admirarme. Y yo no pude sentir más
dicha. Se hizo un silencio sepulcral y todas las miradas estaban puestas sobre
mi vestido. He de reconocer que tengo buen gusto. Anduve lentamente hacia el
altar, saboreando el momento y la inocente impaciencia de mi futuro esposo, que
esperaba al final de la Iglesia.
Cuando
llegué pude percibir la admiración en sus ojos. Unos ojos que buscaban los míos
tras el fino velo que portaba. El sacerdote comenzó a hablar. Sentí el
nerviosismo de Dan a mi lado. Pero yo no estaba nerviosa. Aquello era coser y
cantar para mí. Lo más difícil ya había pasado.
Llegó
el momento de los votos y Dan cogió mi mano para ponerme el anillo.
─Qué
fría estás. ¿Nerviosa? ─Susurró sonriente antes de alzar la voz y jurarme amor
eterno.
Y
entonces llegó mi turno.
─Yo
juro ante Dios serte fiel hasta que la muerte nos separe ─dije mientras me
quitaba el velo ante la mirada expectante de todos. Sonreí con malicia, dejando
entrever mis colmillos, bajo la expresión de terror de Dan. Y, de repente, las
luces se apagaron. ─Y juro ante el Diablo que esa muerte será muy dulce ─sentencié.
Y acto
seguido me abalancé hacia Dan y antes de morderle le susurré:
─Ya puedes
besar a la novia.
Todos
gritaban e intentaban inútilmente huir. Como pequeños ratones en una trampa
mortal. Fue bebiendo sus elixires uno por uno. La sangre decoró mi vestido y
las rosas blancas que decoraban el lugar dejaron de serlo. Y dejé para el final
al sacerdote, quien con una mirada limpia y serena agarraba con fuerza su
crucifijo.
─Hoy no te va
a ayudar ─reí ante esa escena tan patética y tan habitual.
Todos
perecieron. Fue una noche mágica.
Querido
diario:
Ilustración Victoria Francés |
Hoy
ha sido el día de mi vigésimo quinta boda. ¿Recuerdas la primera? Aquél
miserable me dejó plantada en el altar y de la vergüenza corrí hasta el
cementerio. Era noche de luna llena, como la de hoy. Y allí mi creador me
encontró, llorando. Me regaló el regalo más preciado del mundo y me convirtió.
Años
más tarde le vi con otra mujer y con su primer hijo… le dejé crecer y a aquél
traidor le dejé vivir para ser testigo de mi venganza.
Querido
diario:
Hoy
ha sido el día de mi vigésimo quinta boda y a todos sus descendientes les haré
pagar.
Imagen de google |
Muy bueno, muy oscuro.. muy sangriento.
ResponderEliminarUn bes💕
cdc
¡Muchas gracias! ^^
EliminarVaya! Cuanto odio. Jejeje!!! La historia estuvo muy interesante y fue perfecta para una lectura de Halloween, como lo que estaba buscando.
ResponderEliminarFelicidades por tu relato!!
¡Muchas gracias, Clem! ^^
EliminarEs una vampiresa muy rencorosa jaja
¡Gracias por pasarte!
¡Un beso!
Me encantan los microrrelatos de terror. Y por lo que veo se te dan genial. Un abrazo.
ResponderEliminar