ATRÁPEME SI PUEDE | CAPÍTULO 1

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CAPÍTULO 1: ASESINATO EN WHITECHAPEL


31 de Agosto de 1888

Una sombra caminaba serenamente por las calles iluminadas del distrito londinense de Whitechapel. A aquellas horas de la madrugada solo se dejaban ver por aquel barrio los borrachos que entraban y salían de las tabernas y las prostitutas vistiendo sus indumentarias más sugerentes con la esperanza de sacarle a alguno de aquellos muertos de hambre algún cuarto. También las ratas se amontonaban en los rincones de los callejones más oscuros tratando de alimentarse de los restos de la comida podrida que se les caía de los bolsillos a los sin techo, muchos con alguna que otra pinta de más circulando por su organismo.

Sin duda era bien sabido que aquel barrio se había iniciado en un declive cada vez más evidente. Nada que ver con otros distritos de clase media o alta de Londres, cuyos habitantes jamás se atreverían a deambular por aquellas calles donde la degeneración y la decadencia reinaban al entrar la media noche.

Dorset, la conocida como “la peor calle de Londres”, siempre estaba vigilada por la policía debido a todas las peleas que acontecían entre hombres ebrios, quienes perdían la dignidad disputándose el lecho de la meretriz más entrada en carnes. Y mientras, ellas enviaban a sus hijos ilegítimos a hurtar las bolsas con el dinero que aquellos infelices guardaban en sus vestimentas. Sin embargo, la policía no daba abasto en aquel suburbio y muchos se tomaban la justicia por su mano. Muchos niños perdieron sus “zarpas” cuando algún borracho se las cortaba al pillarles in fraganti hurgando en sus bolsillos. Y, por supuesto, muchas fulanas fallecían asfixiadas al ofrecerse a peligrosas prácticas sexuales en los casi setenta y dos burdeles que entonces había en Whitechapel.

Todo esto ya era conocido por nuestra sombra, la cual decidió que sería un buen lugar para llevar a cabo sus maquiavélicos planes. Una fechoría más no tendría demasiada importancia durante la noche, pero al salir el sol todos conocerían su nombre.

Así fue como el caballero cabizbajo, caminando con las manos dentro de los bolsillos y ocultando su rostro bajo la sombra de su sombrero, se adentró en aquellos callejones, esperando “la señal”. Anduvo durante unos minutos entre las sombras de la noche, escuchando los gritos, eructos y risas del interior de las tabernas y los fingidos gemidos demasiado sobreactuados de las prostitutas que se dejaban manosear en cualquier esquina.

Esperó y cuando llegó a la calle Buck´s Row escuchó una voz femenina a sus espaldas.

-Buenas noches, bombón. Veo que necesitas compañía. ¿Te gustaría pasar un buen rato conmigo?

Nuestro hombre giró la cabeza hacia la dirección de aquella aguda voz. Vio cómo la mujer, bastante entrada en años, comenzaba a contonearse y a deslizar sus juguetonas manos por la piel desnuda de sus piernas mientras se mordía con picardía el labio inferior. Él echó un vistazo rápido a los alrededores en busca de algún curioso, pero todo estaba desierto. Muchos lo hacían. Sobre todo aquellos que iban por primera vez a combatir la soledad en brazos de una mujer de la calle y temían ser vistos y que su reputación terminase por los suelos. Irónico, ¿verdad? ¿Qué reputación podían tener los muertos de hambre que vivían en esa zona? ¿Y los inmigrantes? ¿Y los vagabundos?

Ella vio en aquel gesto de equivocada timidez un resquicio de ternura. Quizás esa noche ella fuese la que tomase las riendas del encuentro, cosa que no ocurría muy a menudo, pues los borrachos siempre intentan demostrar su torpe virilidad.

Él hizo un breve gesto con la cabeza, ofreciéndola seguir sus pasos. Ella, esperanzada de tener una noche “diferente” le siguió soltando alguna que otra carcajada y también palabras impropias de una dama. Al llegar a una zona levemente iluminada, él se paró. Y ella comenzó a acariciarle por detrás susurrando improperios en su oído.

El caballero le cogió la muñeca y la empujó bruscamente contra la pared de ladrillo. Entonces cambiaron las tornas, y ahora era él quien se encontraba detrás de la fulana. Todo aquello, como era de esperar, no alarmó en absoluto a la prostituta. Tuvo la reacción contraria.

-Mmm… -ronroneó. -¿Vas a ser un chico malo? -preguntó con una sonrisa la mujer.
--contestó él con un tono demasiado grave antes de deslizar un cuchillo por su garganta y degollarla.
Había sido tan fácil…

***

2 de Septiembre de 1888



Periódico “The Times”:
Homicidio en Whitechapel.
La pasada madrugada del 1 de Septiembre se encontró el cuerpo de una mujer en uno de los callejones del distrito de Whitechapel. La presunta prostituta, tal y como afirman las autoridades, habría sido degollada y se encontraba desnuda en una postura sexualmente degradante.
El jefe de la policía londinense, el Señor Lusk, ha declarado que se trata de un homicidio premeditado, lejos de parecerse a los que acontecen con asiduidad en los suburbios (…).


-¿Ha leído esto, Sr. Holmes? -le preguntó Watson entregándole el periódico mientras señalaba la noticia.
-Interesante… -murmuró.
-¿Cree que se trata de un homicidio puntual y aislado?
-¿Usted lo cree así, mi querido Watson? -preguntó Holmes conociendo de antemano la respuesta.
-Todo apunta a que no, Sr. Holmes.

-Brillante…

8 comentarios

  1. Increíble. Me encanta la forma en que describes todo, me hace meterme de lleno en la historia. Como ya te he comentado anteriormente, no me flipan demasiado los relatos de detectives, pero el tuyo empieza fuerte y muy interesante. Ya tengo ganas de leer mas!!

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    1. ¡Muchísimas gracias guapa! Me alegra mucho que, pese a no ser un género que te guste, te estés adentrando sin problema en la historia :)
      ¡Un besazo!

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  2. Me gustó mucho! Espero impaciente la continuación! Sr. Holmes es un personaje al que se le puede sacar mucho partido. Coincido con Carla, me adentré sin problemas en ese callejon gracias a la forma descriptiva que usas.
    Un beso!

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    1. ¡Muchas gracias Mikel! :) La verdad es que por la extensión que imponemos en la ini no voy a poder ser capaz de adentrarme de lleno en las personalidades de los personajes como quisiera y aunque en este caso el antagonista me apasiona mucho más que Holmes, espero poder escribir una historia más larga que le dignifique de igual modo :)
      ¡Un besazo guapo!

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  3. ¡Jack versus Sherlock! Qué buena idea. Espero ver cómo logran cazarlo (o no).
    ¡Besos!

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    1. Muchas gracias guapa :) La verdad es que la idea me pasó por la cabeza y me entusiasmó :)
      ¡Espero que lo disfrutes! ¡Un besazo!

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  4. ¡Muy buen comienzo! Me encantan los policiales, sobre todo los ingleses :DDD

    ¡Saludos!

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