-Buenas
tardes, Emily. ¿Cómo te encuentras hoy?
-Bien,
doctor. Creo que hoy podremos hacer algún avance.
-Me
alegra escuchar eso, aunque ya te lo he dicho muchas veces, no debes agobiarte.
La terapia es un proceso bastante largo. Hay que ser paciente.
Emily sonríe y se tumba en la
camilla y observa cómo el doctor se sienta junto a ella.
-Bien,
Emily. ¿Qué me quieres contar hoy?
-Verá,
doctor, creo que me estoy enamorando.
-Eso
es estupendo ¿no? Quizás pueda serle de ayuda. Quizás sea la persona que la
pueda ayudar con su obsesión con la escritura.
-Me
temo que no, doctor.
-¿Cuál
es el problema? -Pregunta
confundido.
-El
problema, doctor, es que es… Él es…
El doctor la observa con las
cejas arqueadas, esperando una buena respuesta.
-Doctor,
él es el antagonista de mi novela.
-¡Cielo
santo! -Exclama
el doctor, frotándose lentamente la frente.
Lleva veinte años ejerciendo y
cuando cree que lo ha escuchado todo…
-Emily…
¿en qué habíamos quedado?
-Lo
sé, doctor… -dice
ella con la cabeza gacha.
-Está
bien… Emily… Vas a tener que ser muy paciente… Vamos a necesitar unas cuantas
sesiones más…
Emily suspira.
Unas cuantas sesiones más…
Unas cuantas sesiones más…
Ayyyyy me parece que muchas autoras van a tener que ir con este doctor jajajajajajajajaja Muy bueno:
ResponderEliminarun bes💕
cdc
jajajaja sí, ¿verdad?
EliminarYo entre ellas jaja
¡Un besazo!