Para E.

Recuerdo el día en que nos conocimos. Como si de una cita a ciegas se tratase, con nervios previos y un nudo en la boca del estómago. Dos niñas compartiendo una estúpida ilusión: "que salga bien". Me gusta pensar que de alguna forma sabíamos que iba a ser así.

No recuerdo qué bebimos en ese bar salmantino, pero sí de cómo empezó todo. Cómo surgió de forma natural. Cómo nos fuimos alejando de ellos, aun estando los cuatro sentados en la misma mesa.

Me quedo con la sensación que tuve al verte. Y es que las dos sentimos esa conexión. Algo que no he vuelto a sentir con nadie. Por lo menos, desde el primer instante. Un lazo especial. Doy gracias por ese día. Por ese flechazo que tuvimos y que hemos sabido mantener años y años después. A pesar de los kilómetros. A pesar de que en algún punto lo que nos había unido se rompió. A pesar de que la vida y la geografía nos impida vernos todo lo que nos gustaría.

Pero aquí seguimos. Con mensajes, llamadas y lágrimas en alguna estación.

Con un crépe en Bruselas antes de comer, bombones para merendar y patatas con salsa "nothing".

Con un viaje accidentado en bicicleta por las calles de Ámsterdam.

Con visitas y viajes en autobús.

Con escapadas.

Con aficiones compartidas.

Con charletas en la piscina.

Con un café en Ávila.

Con un no pudo ser en Santander.

Con la lluvia torrencial en la ciudad romana.

Con unas ferias de algodón.

Con mi librería favorita, la cual me descubriste tú.

Con el paseo por el huerto de Calixto y Melibea.

Con nuestros "necesito hablar contigo" y "te llamo y nos ponemos al día".

Con tu preciosa familia que siempre tiene las puertas abiertas.

Con todo lo que nos espera, pues lo mejor está por venir.

Con un "da igual dónde, pero contigo".

Como me dijiste en ese vídeo con el que volviste a robarme unas lágrimas, tenemos algo romántico, pues la amistad también puede serlo. Ojalá todos tuvieran esa suerte. Un amor incondicional.

"Por más tú, por más yo, por más nosotras. Por todo lo que nos queda por vivir y por el ahora." - E. (2015)

***

Hoy ha sido tu día. Un día increíblemente extraño. Pero un día en el que vuelvo a estar orgullosa de ti, del corazón tan grande que tienes y de la mujer en la que te estás convirtiendo. Eres ladrona de sonrisas. Valiente. Guerrera. Humilde. Dulce. Sincera. Divertida. Inteligente. Simple. Complicada. Sensible. Preciosa. AMIGA. 

Y hoy (como cada día) has demostrado ser una increíble profesional. 

Orgullo de amiga. 

***

Al final te das cuenta de que las personas que sigues queriendo que estén en tu vida son aquellas que a pesar del espacio y del tiempo siguen ahí contigo y para ti, igual y mejor que el primer día. La gente que te oxigena.

La suerte de tenerte.

Diría que no puedo quererte más, pero como dicen: te quiero más que ayer y menos que mañana.

Eres familia.

Feliz cumpleaños.

Lo celebraremos con otra aventura.

Y no puedo acabar esta carta sin nuestra canción. Never gonna be alone.